Javier Cenador Cela, Un apasionado del hierro.
Javier es un artesano apasionado por la forja artística, aunque también realiza otros trabajos menos vistosos como colocación de puertas automáticas o cerramientos de fincas.
También es un aficionado a la fotografía e intenta plasmar sus capturas en alguno de sus diseños. Algunas de sus obras han sido expuestas por el Ayuntamiento donde reside, en ocasiones especiales.
Empezó su andadura con el hierro hace ya veinte años cuando entraba a trabajar en un taller de carpintería metálica, en el que hacia puertas y barandillas.
Era unos años más tarde cuando conocería el encanto de una fragua, comenzaba a trabajar en un taller de forja artística. Sin poder acceder a la fragua decide fabricarse una en la casa del pueblo para en sus ratos libres empezar a calentar hierros e ir descubriendo la “magia “del fuego y el hierro.
Poco a poco iba aprendiendo a base de quemar hierros y leer libros de su extensa colección sobre el tema.
Un par de cursos de forja en el centro oficios de León, con Gabriele Curtolo mejorarían la técnica y ayudarían a que este trabajo tan ancestro como es el de herrero, calara hondo en el corazón de Javier y lo terminara de enamorar.
Unos años más tarde le llamarían para trabajar en otro taller de forja en el que ya podría poner en práctica algunos de sus conocimientos aprendidos.
Durante seis años trabajaría desarrollándose como profesional del hierro bajo la batuta del jefe.
Empezaba el verano del 2011 cuando se decidía a dar el paso y ponerse por su cuenta para empezar a dar rienda suelta a todas esas ideas acumuladas en su cabeza y con ganas de plasmarlas sobre el hierro.
Con ganas de darle aires nuevos y modernos a los trabajos de hierro pero con las técnicas tradicionales de trabajarlo desarrolla su trabajo por toda la geografía española, intentando enseñar que la forja puede formar parte de la decoración de una casa.
Javier es un artesano apasionado por la forja artística, aunque también realiza otros trabajos menos vistosos como colocación de puertas automáticas o cerramientos de fincas.
También es un aficionado a la fotografía e intenta plasmar sus capturas en alguno de sus diseños. Algunas de sus obras han sido expuestas por el Ayuntamiento donde reside, en ocasiones especiales.
Empezó su andadura con el hierro hace ya veinte años cuando entraba a trabajar en un taller de carpintería metálica, en el que hacia puertas y barandillas.
Era unos años más tarde cuando conocería el encanto de una fragua, comenzaba a trabajar en un taller de forja artística. Sin poder acceder a la fragua decide fabricarse una en la casa del pueblo para en sus ratos libres empezar a calentar hierros e ir descubriendo la “magia “del fuego y el hierro.
Poco a poco iba aprendiendo a base de quemar hierros y leer libros de su extensa colección sobre el tema.
Un par de cursos de forja en el centro oficios de León, con Gabriele Curtolo mejorarían la técnica y ayudarían a que este trabajo tan ancestro como es el de herrero, calara hondo en el corazón de Javier y lo terminara de enamorar.
Unos años más tarde le llamarían para trabajar en otro taller de forja en el que ya podría poner en práctica algunos de sus conocimientos aprendidos.
Durante seis años trabajaría desarrollándose como profesional del hierro bajo la batuta del jefe.
Empezaba el verano del 2011 cuando se decidía a dar el paso y ponerse por su cuenta para empezar a dar rienda suelta a todas esas ideas acumuladas en su cabeza y con ganas de plasmarlas sobre el hierro.
Con ganas de darle aires nuevos y modernos a los trabajos de hierro pero con las técnicas tradicionales de trabajarlo desarrolla su trabajo por toda la geografía española, intentando enseñar que la forja puede formar parte de la decoración de una casa.